viernes, 23 de julio de 2010

ESQUIZOFRENIA - Narrativa Ana B.Buquet

Me he levantado más temprano que nunca. Hoy es el día. Estoy nerviosa.



Poder tenerte conmigo, Dylan , con la acústica al hombro y tu voz diferente, y ese inglés que prefiero no entender.

Contar contigo, gris y alejado amor...sí, contar contigo en estos momentos, para acunar un sueño, para poder meterme entre tus brazos, y entrelazarme toda, y fundirme y entregarme como antes pudimos...como antes.

Me evado...bah...en realidad, me fugo.

Me sumerjo en mi mar, mientras los otros rasgan el verde con cuerdas y dientes, con dedos y manos, y me embisten con todo, mágicos toros que arremeten al rojo fuego de mi sangre.

Contar con los dos en este notable episodio, porque están aquí, porque están conmigo. Siempre lo estuvieron... me acompañaron tanto... me significaron vida arrancada de aquellos montes de árboles secretos donde hace años él y yo nos escondíamos...



Sublime concierto en medio de este mar de todos, y se van sumando de a uno, ríos y océanos con todas las voces. Pueblos que cantan juntos...Qué lástima me da tu ausencia, Alfredo : si estuvieses vivo con tu guitarra negra...tan solo si pudieras estar para cantarnos "no hay dolor más atroz que ser feliz".



En la inmensa alfombra que por años he ido tejiendo con mares y olas, están rompiéndose en espumas blancas nuestros cuerpos desnudos y desesperados...y somos los de antes...Y encendemos el estéreo y ellos nos cantan, todos juntos, ellos nos glorifican, y sentimos los conjuros de aquel ayer que revive entre nosotros, yo soñando, tú resistiéndote a hacerlo, siempre tan cabal, aunque tan loco.

Amores encantados, sueños rotos, besos sustanciosos en medio de la borrasca...

Letanías de amor, muertas, tantas veces transpiradas, quebradas, maltratadas, destruidas, pero que en sueños, resucitan azules como nuestro cielo que se ha ido, verdes como los pastos que acogieron mis entrañas más esenciales que nunca, y tus locuras con la cordura más íntegra...todas son transparentes letanías de amor, muertas y transparentes como aquellos mares que alguna vez atravesamos a nado, ahogándonos en sueños, sólo en sueños.

Y Bob , León, Silvio y Pablo, me vuelven del desmayo y me dejan aquí, abandonada y sola...

"Hora de irse a dormir" dijo la de blanco. "Apague ese estéreo" añadió.

Ellos cantan conmigo letanías de dolor que quedaron atrás, apagadas, quizás para siempre, aunque, quizás mañana les permitan volver...

2 comentarios:

  1. Tus letras, Ana, siempre profundas, coloridas, fuertes... Dicen mucho de la vida y de tu alma, gracias por compartirlas.

    ResponderEliminar
  2. Gracias a vos querida amiga! Me alegro mucho que pienses así de mis letras. Un fuerte abrazo! Ana

    ResponderEliminar